En un acto público realizado nada menos que en el Teatro Sucre, se posesionó a los nuevos servidores del Ministerio de Relaciones Exteriores en calidad de Terceros Secretarios y luego de haber sido seleccionados, supuestamente, después de un riguroso concurso.
Los escogidos están ubicados básicamente en los grupos afroecuatorianos e indígenas, por cuya condición fueron premiados con 10 puntos más, frente a sus competidores.
Y esto no es todo, porque mediante un contrato celebrado entre la Cancillería y el Instituto de Altos Estudios Nacionales, todos ellos recibirían el título de Magíster después de aprobar 10 módulos y presentar una tesis, lo que significa que antes de un año, tendrán un grado que normalmente se lo obtiene en dos, con la circunstancia agravante, según lo informa la prensa, que carecen de credenciales de tercer nivel, legalmente reconocidas.
Por estas generosidades, las autoridades de educación superior han cerrado varias universidades, se dijo que eran un engaño académico que merecía enjuiciamiento por estafa.
Juzgue la ciudadanía si esto se compadece o no, con lo que oficialmente se busca.