Del jardín de mi alma he juntado con afanes las más bellas flores para un bouquet obsequiarte. He arrancado pensamientos hermosos y multicolores, para evocar fielmente tu presencia de esperanza. Te ofrezco alegres orquídeas de las mejores especies, como homenaje a la belleza reflejada desde tu alma.
Crisantemos muy frescos perfumados y esbeltos forman mi ramillete en ofrenda a tu amistad. Rosas blancas sin espinas de fuertes y largos tallos, sobre-salen en mi bouquet para resaltar tu verdad. Te presento amapolas inspiradoras de canciones, para decirte con ellas que te evocaré siempre.
Fragantes rosas púrpuras seleccionadas de mi jardín, expresan el gran amor de mi corazón para ti. Margaritas cual soles de amarillo intenso, he juntado como gratitud por tu presencia de luz. Y una espiga de trigo ofrendada con devoción, la mejor en mi ramillete es mi oración a Dios por ti.