Soy afiliado al IESS desde hace unos 50 años y jubilado desde hace unos 20 años y, Dios mediante, no he necesitado, hasta ahora, de sus servicios médicos, pese a mis 77 años de edad.
Solicité un turno a través de la central telefónica y tuve la suerte de que me asignen uno en el Centro Integral de Salud, localizado en la 6 de Diciembre y Bossano, en el cual pese a la cantidad de pacientes que deben atender diariamente, sus empleados no pierden la cordialidad y educación con todos, sin importar el estrato económico ni la forma en que esté vestida la persona, lo cual merece ser felicitado.
Algo más, al haber suficiente personal en todas las áreas, los turnos son respetados y los resultados de los exámenes comunicados al interesado a través de la página web o entregados inmediatamente, según el caso. No hace falta volver para retirarlos.
Escribo esto porque creo que es muy importante que las autoridades lo conozcan, porque la única forma de demostrar eficiencia en los servicios médicos del IESS, es trasladando la atención desde los hospitales centrales de la Seguridad Social a los centros médicos privados, mientras ellos no dispongan de la infraestructura, del equipamiento y de los profesionales que sean necesarios.