¿La fantasía puede más que la realidad?
A veces la vida nos hace ver aquello que nos negamos a aceptar porque en ocasiones la fantasía puede más que la realidad, así como van las cosas lo ideal sería ubicar a las personas de la tercera edad en las cárceles y a los delincuentes en los hogares de ancianos de esta manera estaríamos más cerca del buen vivir. En la cárcel a todo adulto mayor nunca le faltaría vigilancia permanente, habitación privada y segura, rodeada de hermosos jardines, atención médica inmediata, medicinas, educación, alimentación, vestido, sillas de ruedas, prótesis, implantes dentales, antojos y un buen baño todos los días con jabón, perfume y toallas limpias, sus camas se tenderían y cambiarían de sábanas todos los días, no faltaría la ropa limpia y las pijamas planchadas, zapatos para toda ocasión, alimentación variada y de calidad, tendrían donde recibir a sus familiares y dispondrían de un lugar especial con acceso a biblioteca, gimnasio, sala de televisión, radio, podrían hacer llamadas gratuitas e ilimitadas, tendrían un directorio que escucharía sus quejas y dispondrían de un código de conducta respetado en su integridad; los delincuentes en un asilo de ancianos estarían en una habitación pequeña y compartida, sin vigilancia de ninguna naturaleza, sin ningún tipo de atención médica ni psicológica, comida fría, escasa y sin valor nutritivo, donde las luces se apagan muy temprano, no existe sala de recreación y tampoco acuden las visitas de familiares o amigos, el abandono, la soledad y la nostalgia son sus únicos compañeros, donde se paga por cada mes de atención y la esperanza de salir con vida es muy escasa.
¿Cuánto le cuesta al Estado un delincuente preso por mes y cuánto es la pensión mensual de un jubilado que tiene que arreglárselas como pueda?