Error enmendado

Los medios de comunicación informan respecto a la aprobación por parte de la Unión Europea, del Acuerdo Comercial con Ecuador y la posibilidad real de que el próximo 11 de noviembre se suscriba formalmente y comience a aplicarse a partir del 2017, como es la aspiración especialmente del sector exportador ecuatoriano.

Esta noticia es alentadora y quienes participaron en esta última etapa de negociación, merecen la felicitación y el reconocimiento de toda la ciudadanía. Independientemente de lo anotado, no debemos olvidar que llegamos a esta crítica situación porque en el 2102, basados en un mal entendido principio de “Soberanía”, abandonamos la negociación del Acuerdo Multipartes entre la Comunidad Andina y la Unión Europea.

El hecho de que a fin del 2016, la Unión Europea deje sin aplicación las preferencias arancelarias unilaterales en nuestro favor, jugó sin duda, un papel trascendental para vencer los obstáculos y acelerar la culminación de esta negociación, en la que se advierte el giro de los negociadores ecuatorianos para despojarse de ese engañoso principio de “Soberanía” que en el pasado nos sacó del Acuerdo Multipartes.

En las circunstancias actuales que viven los países no queda duda que el “libre comercio” es mejor que la autarquía por lo que, el paso dado por Ecuador debe entenderse como una “enmienda al error del pasado” respecto a los Tratados de Libre Comercio, que debe servir de referencia para que un nuevo gobierno proyecte y concrete la negociación de estos Acuerdos con otros países o grupos de países, especialmente con Estados Unidos que ha sido y es nuestro principal socio comercial, más aun cuando desde finales del 2007, Ecuador se abrió unilateralmente al mundo, cuando redujo al 0%, el arancel para la mitad de bienes que forman parte del universo de productos que importamos anualmente, principalmente materias primas y bienes de capital procedentes de países de mayor desarrollo, con los cuales no tenemos acuerdos comerciales.

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