Envidia sana

Seguidamente uno ve reportes informativos sobre las carreteras en la Costa, algunas son verdaderas autopistas y uno siente en verdad una sana envidia por los logros de las ciudades de la Costa ecuatoriana,  principalmente  de Guayaquil, entonces uno se pone a observar las personas electas por Pichincha para la Asamblea y no ve uno solo que trate por lo menos de defender los derechos de nuestra ciudad. 

El Municipio se dedica a los parques, conciertos y toda cosa concerniente con la cultura, entonces quedamos solos y a nuestra suerte, con un proyecto de aeropuerto que parece que nunca se terminará, sin calles, sin aceras, con una inseguridad en aumento.

Pero, sin embargo, el señor Alcalde está muy contento con el bulevar de la avenida Naciones Unidas y cosas por el estilo. Nuestros asambleístas ni siquiera comentan el tema menos aún se pueden interesar en algún proyecto que no sea el de boicotear a sus adversarios. En fin,  tengo sana envidia de las provincias que con menos representantes parece que tuviesen más.

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