Ecuador, país de paso

En días recientes, a más de las ya normales capturas de droga que está en tránsito, hemos visto a un buen número de cubanos que habiendo ingresado a nuestro país sin visa han quedado varados en Centroamérica. Gracias a una política de brazos abiertos, sin control ni criterio, impulsada por la novelería de este gobierno, nuestro país se ha convertido en un país de paso, en un “tambo”, ni más ni menos. Cubanos, africanos, gente de Oriente Medio y asiáticos, entre otros, nos visitan, no por nuestra geografía ni por la gastronomía, o arquitectura colonial. Lo hacen porque es muy fácil venir a este país y usarlo como un trampolín para llegar a otros lares; es decir, nos usan . Somos un “paisito de paso”.

Hoy más que nunca los países toman precauciones para filtrar de alguna manera a las personas que ingresan a sus fronteras. Los peligros que la permisividad acarrea son muchos y parece razonable que esta ilusa política de brazos abiertos tenga límites, sobre todo cuando es obvio que algunos no son turistas ni pretenden serlo. ¡Felicitaciones a los noveleros que abarataron al país para que sea un mero tambo! 

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