Últimamente se pasa una propaganda del Consejo de Participación con la que se llama a la ciudadanía a tomar parte en el control de los recursos públicos. A propósito de esa convocatoria, ¿alguien puede controlar el uso y abuso de la cantidad inconmensurable de vehículos estatales?
Es que ahora, por las mañanas, se puede ver a miles de carros pertenecientes a ministerios, secretarías, del municipio y demás entes gubernamentales, muchos con chofer, guardaespaldas y escoltas, que van a recoger a un sinfín de funcionarios, sean estos ministros, viceministros, subsecretarios, asesores, asistentes y otros (la lista es interminable).
La procesión de estas largas caravanas se repite al mediodía cuando les llevan a “lonchar” a los funcionarios y en la tarde cuando se termina la jornada laboral.
Considero que, todos esos funcionarios o al menos de subsecretarios para abajo, se deberían transportan por sus propios medios, como era antes de la “revolución” o aun mejor, para aliviar en algo el tráfico en Quito, que se contrate un bus por institución que haga el recorrido recogiendo a tanto funcionario. Aunque con la cantidad de instituciones que hay ahora tal vez sea mejor que utilicen el servicio de transporte público.