La intención de una consulta popular, entre otros fines, para corregir presuntas distorsiones producidas en el Consejo de Participación Ciudadana, por la designación de las autoridades de control, sin que se hayan planteado alternativas, corresponde reflexionar que si retorna el sistema anterior, podría volver el caos parlamentario del reparto de espacios, con la circunstancias que en la actualidad la mayoría la ejerce Alianza País, y en lo futuro sería algo parecido, por lo que dichas autoridades entonces seguirán similar línea, consecuentemente debe analizarse un sistema mixto, es decir que las autoridades sigan designándose por concurso de méritos y oposición, bajo participación ciudadana, pero con la observación de delegados parlamentarios de las primeras cuatro o cinco bancadas, debiéndose integrar todas las autoridades del CNE, la Función Judicial y demás organismos, bajo el mismo sistema, es decir que la Asamblea Nacional, designe un delegado por cada bancada, como observadores con voz, de tal manera que los actores políticos puedan fiscalizar estas designaciones, incluyendo tal sistema en los procesos electorales, a fin de que no existan sospechas de “opacidad”, con lo que se evitaría, las indignas reyertas por la “troncha” o las fáciles acusaciones de fraude.