La noche del domingo estuvo investida de incertidumbre para todos los ecuatorianos. Un anhelo de paz estaba arraigado en los corazones del pueblo, pues ya eran 12 días de paralizaciones debido al desacuerdo en la eliminación del subsidio de la gasolina. Para dar fin a esto, se llevó a cabo una mesa de diálogo entre el Gobierno y la Conaie. Ambas partes intervinieron para lograr una resolución que se buscaba sea idónea, donde ambas partes cedan de alguna forma para llegar a un acuerdo. Luego de una larga espera, el Gobierno derogó el decreto 883, pero con el compromiso de crear una comisión para elaborar un nuevo decreto.
Considero fundamental que en este nuevo decreto se instauren medidas adecuadas y constitucionales; medidas que no perjudiquen al pueblo, y menos a los más pobres. Sin embargo, es importante que se desarrolle un plan para enfrentar la crisis económica que hoy atraviesa nuestro país. Algunos dirigentes indígenas que intervinieron en la mesa de dialogo dieron algunas propuestas, con el fin de reducir gastos innecesarios. Debemos ser conscientes que estamos inmersos en un grave endeudamiento, situación que nuestro país no puede seguir soportándolo.