Muy pocas son las personas respetables que salen a servir y autoeducarse, su trabajo le permite hacerlo. Mediante una buena conversación con los distintos usuarios, de distintos y diversos estratos sociales, culturales y económicos.
No tienen idea de lo que representa servir a la comunidad. Toca capacitarlos, pues ellos son la carta de presentación de nuestro pueblo.
Aquellos que hemos tenido que vivir y vivir todos los días, el mismo desaire de cierto grupo de personas indeseables… Le ven a uno con silla de ruedas o muleta, se pasan; el volumen alto de sus radios, no tiene el menor sentido de respeto, cuando estamos conversando los pasajeros, suben más el volumen. Donde quiera se paran a botar la basura o hacer sus necesidades biológicas.
Sería interesante, que las autoridades hagan que ellos mismos se castiguen, en la factura que deberían entregar, ofrecer además un instructivo, en el cual consten los artículos, por los cuales se los pueden hacer sancionar, además los números y direcciones para hacer la respectiva denuncia.
El SRI, debería poner atención a este sector, muchos vehículos trabajan todos los días del año, con dos choferes. Negociazo a más del alto nivel de contaminación en todo el año.