Cuota política en todo: con bombos y platillos, a fines del mes de agosto del 2011, entregaron vía encementada para el trole (un merecido aplauso), acudieron dignas autoridades al parque Julio Andrade que se sometió a un proceso de recuperación y hoy ya son dos semanas de una nueva agencia de seguridad: Armiled, pero que no cumple ninguna función de limpieza del parque. Qué cambio tan brusco, hoy el panorama es basura y basura y muy pronto roedores y más… ¿Qué cambios tan absurdos?, con un símil al gobierno central. ¿Algo bueno por algo malo, pagando más hoy por seguridad y limpieza? Rubros que con un buen criterio de inversión, permitirían realizar maravillas como instalación de recipientes o colectores de basura y evitar mirar basura en todo lado, no solo de este sector sino de Quito. Aún, sueño despierta.