En 1933 el Gobierno alemán intervino a la universidad, expulsando a los profesores que no comulgaban con el régimen. La nazificación de la universidad en Alemania la convirtió en transmisora de la ideología oficial. En 1947, el régimen peronista eliminó la autonomía universitaria expidiendo una ley que convirtió a las universidades en dependencia del Ejecutivo, teniendo este a su cargo el nombramiento de rectores y catedráticos. La universidad ecuatoriana en el período del “Buen Vivir”, oscila entre la mercantilización (con universidades privadas tan caras como mediocres) y una universidad pública funcional a los intereses del gobierno. La correización de la universidad pública ha conseguido “despolitizarla” (en el peor sentido) y desmovilizar a la juventud. Resulta alentador ver a una entidad prestigiosa como la Universidad Andina resistir a intentos de injerencia del Gobierno. Sus autoridades, profesores y estudiantes han dado una lección de dignidad a la sociedad ecuatoriana.