Una de las estrategias adoptadas últimamente por los militantes de Alianza País es tratar de boicotear las marchas de las organizaciones sociales, sobre todo cuando son de reclamo al Gobierno, por sus políticas en contra del pueblo.
Este 19 de marzo no fue la excepción, pues al finalizar la marcha convocada por esas organizaciones en la plaza de San Francisco, en Quito, pudo evidenciarse como a pesar del cerco policial trataban de llegar a la tarima donde estaban los organizadores de la manifestación. Pero algo que causó enojo y repudio en los marchantes entre quienes estábamos: amas de casa, estudiantes, trabajadores, jubilados, etc., fue el sabotaje causado al fluido eléctrico en la plaza de San Francisco y sus alrededores, con el fin de impedir la intervención de los dirigentes, lo que no amedrentó el ánimo del pueblo que pacientemente esperó cerca de dos horas, para finalmente expresar su protesta y rechazo ante tanto abuso y prepotencia.
Los militantes de esa agrupación política, hoy en el Gobierno, deberían pensar antes de actuar de esa manera, pues lo único que trae es el enfrentamiento entre ecuatorianos.