La presente tiene por objeto solicitar a usted que, antes de que concluya el periodo de los sucesivos cargos de Vicepresidente y Presidente, para los cuales fue usted fue elegido respectivamente en los años 2006, 2012 y 2017 por el pueblo ecuatoriano; tenga la amabilidad de explicarnos a sus electores las razones por las cuales usted en ningún momento intentó recuperar algún monto, aunque sea simbólico, de los miles de millones que desaparecieron de las arcas fiscales en los últimos catorce años.
Como usted comprenderá, en la mente de casi todos nosotros deben estar presentes los análisis que hizo mi recordado colega, penosamente ya fallecido, don Eduardo Valencia, en los cuales él demostraba las enormes cantidades de dinero cuyo objeto de gasto no había sido adecuadamente registrado en la contabilidad de las respectivas instituciones públicas; especialmente el Economista Valencia hacía referencia al caso de la Corporación Financiera Nacional, institución en la cual existía un faltante de USD 1 178 millones por la compra dictaminada por el Ejecutivo de los famosos Certificados de Depósito Reprogramados al cien por ciento de su precio original, cuando su valor de mercado no llegaba a superar ni la mitad de su valor nominal.
La importancia de este pedido se fundamenta en dos hechos de actualidad específica: por un lado, usted está próximo a dejar los cargos que ha ocupado en la Función Ejecutiva en estos últimos 14 años y, así considero, parecería adecuado que deje solventando esta incógnita.
Por otro lado, en vista de que la CFN deberá ser fortalecida a fin de suplir, por lo menos en parte, el financiamiento externo que hoy se encuentra prácticamente agotado; consideramos que es urgente dejar saneada en todos los aspectos la contabilidad financiera de dicha entidad.