Con Trump, la idea de que los acuerdos comerciales han destruido empleos vuelve al debate. Interesante notar que en el Ecuador los detractores del libre comercio, antes de Trump, usaban a México como ejemplo de pérdida de empleos a causa de NAFTA. Hoy, con el discurso anti globalización de Trump, cambian de lado y sostienen que NAFTA destruyó empleos en los EE.UU. Sin embargo, la evidencia e investigaciones de prestigiosas instituciones demuestran que la mayor cantidad de empleos en el sector manufacturero de los EEUU se perdió por los avances tecnológicos.