Lo que sobresale del mensaje de Putin a la Asamblea Federal de Rusia, además de los logros en el campo social, es la referencia a las armas que Rusia desarrolló cuando EE. UU. la rodeó con cientos de bases, creó una doctrina que le faculta emplear armas nucleares cuando le plazca, abandonó el tratado antibalístico instalando sistemas antimisiles que vulneran la paridad estratégica alcanzada. Sólo entonces, Rusia desarrolló nuevos modelos de armas estratégicas.
Den garantías de que no van a agredirnos, reclamó previamente Moscú. Garantías no damos, hagan lo que les dé la gana, les contestaron. No creyeron que Rusia contaba con los materiales para crear armas estratégicas invulnerables que no siguen trayectorias balísticas predeterminadas y esquivan cualquier sistema de defensa antimisiles. Ahora que Rusia aventaja a los demás países en armamento de tecnología avanzada, Putin expresó la esperanza de ser escuchado. Amanecerá y veremos.