Miré el programa “Hora 25” en el que se presentaron el expresidente ecuatoriano Rodrigo Borja y el expresidente español Rodríguez Zapatero, tenían distintas percepciones, principalmente sobre el gobierno de Maduro.
En el fondo, Rodríguez mantenía la tesis de seguir buscando la reconciliación, en tanto que Borja creía que ya era demasiado tarde para ello y que todo terminaría en un baño de sangre. Ahí se plantea el diferente grado de permisividad, apertura o hasta debilidad de los políticos.
Esta dicotomía, es extensiva a otros conflictos actuales como los de Nicaragua y los derivados del enfrentamiento armado de Colombia, donde unos presionan por la renuncia de Ortega y su cónyugue y otros critican el acuerdo de paz firmado con los guerrilleros.
Las tesis de la libre determinación de los pueblos,era procedente cuando el gobierno norteamericano, creía que con su intervención militar podía terminar la disputa. Hoy las circunstancias son diferentes.