Causa extrañeza ver que el Consejo Provincial de Pichincha solo acude a remediar esta vía solo en los sectores que se producen los derrumbes y nada hace para reparar la carpeta asfáltica colapsada hace años desde Calacalí, Nanegalito y Milpe. A partir de este recinto la carretera parece totalmente nueva hasta llegar a la Independencia, pasando por los Bancos, Pedro Vicente Maldonado y Puerto Quito.
Esta carretera, recordamos, fue construida por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército durante la Prefectura de Federico Pérez Intriago, lo que también nos hizo recordar su slogan: “obras ordinarias, extraordinariamente bien hechas”. Ahora ya no tenemos esas autoridades, competentes y honradas, solo tenemos aquellas de la ‘robolución’ del siglo XXI, con obras extraordinariamente tan mal hechas y con abismales sobreprecios que nos irisan el cuerpo al conocerlas.
Las siguientes prefecturas nada han hecho por esa carretera en el tramo Calacalí-Milpe, en donde los accidentes se originan mas que por los derrumbes, por los cráteres que hay en ese sector, prefecturas que han vegetado, sin ningún resultado positivo para la ciudadanía. Sería importante que las nuevas autoridades que vayan a la prefectura en el 2019, emprendan en un verdadero plan global de mejoramiento y mantenimiento de las carreteras de Pichincha.