Ha transcurrido 30 días de la investidura como Presidente Constitucional del Ecuador del señor Lenin Moreno Garcés en la Asamblea Nacional. Un breve respiro, permitió que de manera violenta se exterioricen hechos antijurídicos que afectan bienes jurídicos como la credibilidad, honor del país y de los ciudadanos.
Lamentablemente, el modus vivendi del Gobierno de los últimos diez años continúa discrecionalmente, aplicando estrategias de manipulación mediática, que mantienen la atención de la ciudadanía distraída y cautivada en temas sin importancia real.
Los hechos son recientes merecen la atención necesaria y el esclarecimiento total, que permitan recuperar la institucionalización democrática del país, confiscarlos, será una tracción efímera que desestabilizará y fraccionará aún más la frágil democracia.
Investigar de manera clara, objetiva e imparcial, permitirá a los administradores de justicia aplicar los correctivos necesarios, sancionando a los verdaderos culpables, recuperando así la confianza de la ciudadanía, la que se integrará en un solo objetivo consolidar la economía y la paz.