Ecuatoriano, no botes tu voto
El populismo utiliza millonarios recursos provenientes de la corrupción y de otras actividades ilícitas ejecutadas por mafias locales e internacionales, para engañar a quienes esperan, con mucha razón, soluciones al desempleo, la inseguridad, los pésimos servicios de salud, educación, conectividad, que se han acumulado por décadas.
La desinformación y las falsas promesas son parte de los medios que utiliza en su campaña política el populismo para confundir a los electores, induciéndoles a votar por una candidatura ligada a la corrupción, la ineficiencia y el despilfarro, en lugar de hacerlo por quien demuestra con hechos capacidad de gestión.
Similares campañas fueron utilizadas en muchos países que actualmente soportan crueles dictaduras que se han perpetuado con base en el terror, la pérdida de las libertades, la corrupción, el narcotráfico y la creación de grupos delincuenciales que se apoderaron de todas las instituciones de un Estado de derecho.
El próximo 13 de abril, nuestro país tiene la oportunidad de poner fin a las mafias políticas que tienen como principales atributos: la corrupción comprobada con sentencias condenatorias, la ineficiencia demostrada con escuelas y hospitales del milenio, refinerías, hidroeléctricas, y una lista enorme de obras que nunca funcionaron, ser los actores de una Constitución Política que favoreció la injerencia política en la justicia y en los organismos de control para asegurar la impunidad de sus irregularidades.
No podemos equivocarnos nuevamente en las próximas elecciones. Debemos dar apertura a la inversión privada nacional e internacional porque es el único medio para generar empleo que tanto necesita la mayoría de los ecuatorianos. El sector público ya tiene exceso de personal, y no es generador de empleo. Les pido votar por la libertad, la eficiencia y la transparencia.
Mario Andrade Trujillo
Política masticada
La política no es un tema lejano: está en lo que comemos, lo que vestimos y en cada decisión que tomamos. Pero cuando nos hablan con términos confusos, cifras técnicas y mensajes diseñados para el poder, muchos prefieren ignorarla. ¿El resultado? Un sistema que se beneficia de nuestro desinterés, perpetuando desigualdades e injusticias que vivimos día a día.
La política no es solo para expertos: es para el vendedor ambulante que paga impuestos absurdos, para la madre que lucha por educación digna, para el joven que ve cómo le cierran oportunidades.
Entender eso nos permite mirar desde otra óptica la realidad, esa que duele cuando el salario no alcanza, cuando la corrupción sale impune o cuando los medios distorsionan la verdad. No hay “ajustes técnicos”, sino recortes que afectan a los más pobres; no hay “medidas necesarias”, sino decisiones que favorecen a unos pocos.
La premisa es clara: si no nos involucramos, siempre gobernará quien menos nos conviene. Este es un llamado a dejar de ser espectadores y convertirnos en protagonistas. Porque la política, cuando se mastica, deja de ser un monólogo de élites y se convierte en una herramienta de todos.
Elvis Alberto Herrera Cadena
Los políticos y el sentido común
Uno de los grandes problemas de la actividad política en Ecuador radica en que, o intencionalmente o por deficiencias educativas, no hacen uso del sentido común en sus razonamientos.
Esto se evidencia en muchas de las intervenciones públicas, cuando lanzan acusaciones o hacen aseveraciones que son fácilmente rebatibles.
Por ejemplo: decir que, si un embarque de banano es detectado con droga en el destino, es culpa del dueño de la empresa exportadora. Sin entrar en detalles, quien hace esa aseveración debía primero comprobar que no se trata de un caso de contaminación de los contenedores. El asegurar sin las comprobaciones necesarias es una seria irresponsabilidad que descalifica a cualquier candidato a cualquier dignidad. Esto es casi lo mismo que ocurre con una serie de acusaciones de corrupción, que los acusadores de los caos de exportación de drogas se afanan en justificar diciendo que quien ejercía la presidencia cuando se dieron esos casos, no puede estar en todo.
Aseverar que contratos del Estado han sido entregados a familiares del presidente, sin presentar pruebas, también es signo de irresponsabilidad, lo que ubica al denunciante en la categoría de indigno de la confianza del votante.
Calificar de negligencia en la aplicación de medidas de seguridad a un gobierno, sin analizar si los procesos se han iniciado o por qué no se han iniciado, o las causas de las demoras, es por decir lo menos, una verdadera burla al pueblo, cuando el denunciante se autocalifica de conocer la administración pública. La tardanza de muchos procesos, muchas veces se empantana en la maraña burocrática de un sistema de compras públicas, que, siendo una buena idea, fue muy mal implementado por quienes pretendían beneficiarse del mismo, conociendo los recovecos y las falencias.
Y lo que es peor, hacer acusaciones cuando se cometieron actos iguales o peores durante el gobierno al que perteneció la acusadora, para las cuales abundan en justificaciones hasta ridículas, es, por decir lo menos, una muestra de falta de razonamiento por su rabo de paja.
José M. Jalil Haas
Con que a mí no me afecte
Es lamentable que en nuestra sociedad se hayan normalizado ideas, pensamientos y aseveraciones que demuestran un fuerte enfriamiento del sentido humano; frases que demuestran apatía espeluznante, que son el sentir de personas alejadas de las necesidades de los demás; sin saber que lo que afecta a uno, irremediablemente nos afecta en algún momento a todos.
Sociedad desvalorizada.- “Con que a mí no me afecte” es una de las frases más frías, apática, amoral, nihilista, que demuestran la deshumanización de la sociedad. Uno de los objetivos del neoliberalismo es crear personas con altos niveles de apatía, con muy bajo nivel cultural, con salud deplorable, con miedos, con mentalidad nihilista (vida sin sentido, sin propósito), para manejar fácilmente sus mentes y voluntades. Lo hemos constatado en este período de tres gobiernos de los neoliberales Moreno, Lasso y Noboa, con recortes presupuestarios en educación, salud, agricultura y seguridad; logrando así desvalorización y apatía en gran porcentaje de la población que, manejados mentalmente, caen en el círculo vicioso de volver a votar por candidatos neoliberales.
Democratización de la violencia.- En nuestro país ya se ha normalizado la apatía a través del maltrato intrafamiliar, muertes por hambre y desnutrición, muertes por falta de inversión en salud pública, desplazamientos y migración por desempleo y extorsión (mal llamada vacuna), masacres y muertes colaterales, cifras alarmantes que más que cifras son personas y familias golpeadas por el abandono estatal.
En días previos a elecciones en Ecuador, reviven viejos actores politiqueros, muy bien pagados, por cierto, para inocular en la opinión pública miedos y odios, enarbolando las palabras democracia y libertad. Lo cierto es que lo único que el neoliberalismo ha democratizado es la pobreza y la violencia; y ha dado libertad para migrar y vivir bajo la línea de pobreza.
Hipnosis política vs. prensa alternativa.– Hay que reconocer el destructivo trabajo de la prensa tradicional, patrocinada por oscuros poderes desde cuentas offshore o desde fondos estatales desviados ilegalmente para tal efecto; con gran complicidad de holdings y élites políticas neoliberales, implantando narrativas en las mentes de sus audiencias para confundir, distraer, dividir y llenar de odio; induciendo al votante a un estado de “hipnosis política” para elegir a quien lo empobrece integralmente.
En buena hora, como contraparte al ataque de la “prensa mermelera”, en Latinoamérica y en nuestro país se ha venido desarrollando y especializando la prensa alternativa, prensa que muestra la noticia de manera libre y objetiva, sin más presión que expresar la verdad.
Inversión social para generar desarrollo.- Para retomar el desarrollo económico, político, social, y cultural, se hacen necesarios planes de inversión aplicando el círculo virtuoso de la inversión pública, que genera bienestar a todo nivel.
· Inversión en sistema de salud pública, en educación, en cultura, en seguridad. Inversión en la economía popular solidaria, impulsando emprendimientos que generan oportunidades de trabajo para el 85 % de la población. Solo así podremos erradicar la pobreza, la violencia y la muerte.
Renovar la mente.- La apatía de los que, sin ninguna vergüenza, pregonan la frase: “con que a mí no me afecte”, es lo que realmente hace daño a la democracia, a la economía, al tejido social, a sus hijos y hasta a sus propias vidas.
Esforcémonos por renovar la mente, por lograr una sociedad con altos valores morales, que cultive el hábito de la lectura, que desarrolle el espíritu analítico; solo así no seremos esclavos serviles de oportunistas en el poder.
Pedro Pablo Jijón Ochoa
Elecciones, día del Maestro, Domingo de Ramos
El domingo 13 de abril del 2025, coincidentemente se celebrarán y realizarán tres eventos de enorme trascendencia e importancia para nuestro país, lo cual denota una situación que preconiza posibles hechos y situaciones de honda recordación para la ciudadanía, pues se une un evento cívico como son las elecciones de Presidente y Vicepresidente, un recuerdo emotivo y muy sentido del Día del Maestro Ecuatoriano y la celebración religiosa cristiana del Domingo de Ramos.
Tendremos las elecciones en segunda vuelta para las dignidades de Presidente y Vicepresidente del Ecuador, a realizarse el domingo 13 de abril del 2025, que vienen luego de que quedaron finalistas, nuestro actual Presidente y candidato Daniel Noboa del partido ADN y la candidata Luisa González del partido Revolución Ciudadanía y RETO, lo cual será luego de que concluya la campaña electoral el jueves 10 de abril del 2025. Se evidencia un fervor electoral sin precedentes, con altas expectativas por las reñidas elecciones que se avecinan, pero esperamos que prime el sentido común, la memoria colectiva y especialmente un accionar razonado y profundo al momento de consignar el voto, pues se está jugando el destino del país y debe existir responsabilidad en sus votantes y un criterio alejado de fanatismos y elucubraciones, pues debe analizarse claramente la realidad y credibilidad de las propuestas del candidato y la candidata presidencial. Esperemos y confiemos que los resultados que se proclamen, primeramente sean legítimos y en segundo lugar reflejen realmente la voluntad ciudadana.
Por otro lado, será el Día del Maestro Ecuatoriano, que se celebra cada 13 de abril y tiene por sentido recordar el esfuerzo y sacrificio que realizan diariamente los profesores y profesoras en las distintas modalidades de estudios y fue instituido en nuestro país el año 1920 por el Presidente Alfredo Baquerizo Moreno, en honor al natalicio del escritor Juan Montalvo, nombre insigne de la cultura ecuatoriana, que nació el 13 de abril de 1832. Posteriormente, se incluyó a otros dos excelsos representantes de nuestra cultura, Monseñor Federico González Suárez, eminente historiador y educador, y Luis Felipe Borja, destacadísimo abogado y educador. Es muy honroso felicitar y augurar los mejores éxitos a ese grupo tan selecto y especial de maestros y maestras que en su diario sacrificio y abnegación orientan y dirigen a esa niñez y a esa juventud ávida de conocimientos.
También ese domingo 13 de abril del 2025 se recordará el Domingo de Ramos como el inicio de la Semana Santa, siendo la jornada en la que se conmemora el ingreso triunfal de Jesús en Jerusalén, de acuerdo a lo que se menciona en la Biblia y es un día muy propicio para reconciliarnos con nosotros mismos, con el prójimo y quizás lo más importante dejar atrás rencores y agravios y concientizar que lo más importante en nuestra vida es nuestra creencia religiosa en un Dios protector y benefactor y que mejor que rendirle en ese día nuestro homenaje de humildad y alabanza.
Esperemos que esta notable coincidencia sea la portadora de enormes presagios de beneficios y venturas para nuestro hermoso país Ecuador y que su prestigio y reconocimiento internacional perduren para siempre, con la seguridad de que la democracia siga siendo en nuestro país la portadora de la libertad, la prosperidad, la seguridad y la noble y abnegada superación que merece tenerla todo nuestro pueblo.
Que estas elecciones se desarrollen en un ambiente de paz y tranquilidad, sin violencias, ni atropellos, pues necesitamos vivir en paz y en armonía entre todos nosotros.
Hernán Patricio Orcés Salvador