La caridad empieza por casa
Hay que pensar en uno mismo a veces, y no solo en los demás. "Echar del país a los extranjeros en situación ilegal para reservar las fuentes de trabajo de sus compatriotas, al afirmar que la caridad bien entendida empieza por casa" (El Mundo, 29/4/1995, España).
No comprendo cómo existe tanta indolencia por los propios profesionales ecuatorianos, especialmente por los médicos, que han tenido que salir a otros lares, en busca de un sustento familiar y realización profesional. Desde hace rato, mucho se habla y se favorece a "profesionales extranjeros", especialmente cubanos, que ni siquiera se sabe cuál es su grado de preparación, especialidad y práctica en la medicina.
Primero la preocupación debe ser por los propios ecuatorianos que en muchas profesiones existe una tremenda indiferencia. Manuel Viola señalaba: "Lo malo de la caridad es que no tiene fondo".