Sin embargo; la semana anterior, 71 asambleístas irresponsablemente y vestidos de un alto patriotismo, aprobaron la creación de un cuerpo civil armado para la protección de altas autoridades del Estado.
Esto implica la creación de mayor burocracia en tiempo de crisis. Dichas autoridades tienen seguridad pública (militar y policial) por historia; sin embargo se quiere cambiar este tipo de seguridad por vanidad en tiempos difíciles para la economía ecuatoriana. Se argumenta que EE.UU. y otros países tienen éste servicio, pero recuérdese que durante todo el tiempo se pasó criticando al Imperio, al sistema capitalista y solo el servicio secreto le gusto.
Un asambleísta por ética debe legislar con inteligencia, conciencia, independencia, justicia y sabiduría en beneficio de la mayoría de ecuatorianos; más no a favor de las altas autoridades del estado que tienen sueldos dorados e innumerables beneficios económicos. Con ésta aprobación se ha comprobado una vez más, que los señores legisladores de Alianza País solo cumplen órdenes del gran jefe hasta la última semana; sin oponerse a nada y sin poner a prueba sus conocimientos por temor a ser expulsados de su movimiento.
Finalmente, dichos asambleístas con alto patriotismo faltaron a sus preceptos, a sus principios y a lo que predican; por ende el pueblo debe juzgarlos ya que son sus verdaderos mandantes.