Aniversario de la U.C.

En los próximos días la ciencia, la cultura y la academia conmemoran y celebran un año más de la fundación del Alma Máter. Efectivamente se cumplen 187 años de la fundación de la distinguida Universidad Central del Ecuador. Demás está decir todos los logros en lo que tiene que ver con la excelencia académica, la capacidad de sus docentes, sus investigaciones y aportes científicos y años atrás su prestancia en las decisiones políticas de gobiernos de turno antipopulares como el actual, sin embargo, aunque en este último acápite la Central casi no opina (principalmente sus estudiantes, la juventud), su excelencia académica la coloca en un indiscutible primer lugar dentro de la amalgama de universidades ecuatorianas. Vale la pena felicitar a toda la comunidad universitaria perteneciente a la Universidad Central, en persona de mi maestro de quien con orgullo cuento con su amistad el reconocido científico nacional e internacional doctor Édgar Samaniego Rojas, quien ha reestructurado para mejor, para bien, lo logístico y lo académico que en los últimos años antes de este, su primer periodo de Rector, estaba “semidescuidada”. Hoy la Universidad Central con sus reformas es un referente para todas las universidades y nada tiene que envidiar a universidades de países vecinos y con autoridades que se encuentran a la par de un Julio Enrique Paredes, Manuel Agustín Aguirre, etc., continuara por la senda de la permanente superación y mejoramiento. Vaya mi agradecimiento imperecedero a la universidad que me supo educar con eficiencia y a mis maestros, varios lamentablemente ya fallecidos. O, jubilados forzosamente por esta “revolución del siglo XXI”.

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