El Gobierno ha ofrecido “muy gentilmente” a las amas de casa la posibilidad de afiliarse al Seguro Social. La gran mayoría de amas de casa tendrá el inconveniente de que su esposo, por muy buena voluntad que tenga de afiliarlas, su escaso sueldo no le permitirá hacerlo; entonces como las amas de casa siempre hacen milagros con el dinero que su esposo les da mensualmente, ahorrará USD 2 cada mes para pagar su seguro, y se sentirá muy contenta de que no alteró la economía del hogar y ya es afiliada. Pero no se ha puesto a pensar que deben pasar 20 años de lavar, planchar, cocinar, arreglar la casa, atender a sus hijos, a su esposo, y al perro; para al cabo de esos 20 años recibir USD 77 mensuales de jubilación, los mismos que de aquí a 20 años le servirán de muy poco.