Jamás estaré de acuerdo con la represión popular venga de la derecha o de la izquierda y por eso repudio lo hecho en el régimen febrescorderista. Pero no puedo quedarme indiferente ante las expresiones de la señora secretaria de pueblos en entrevista a EL COMERCIO cuando poco menos que santifica y glorifica a quienes fueron sus compañeros en Alfaro Vive Carajo cuando “en nombre del pueblo” secuestraron, asaltaron y causaron la muerte de policías y otros inocentes. Que algunos de ellos hayan pagado sus culpas, otros se hayan arrepentido y algunos formen parte del actual Régimen, no borra las acciones vandálicas y terroristas que cometieron aunque ella ahora llame a los asaltos armados “recuperaciones”, calificativo que ya lo estarán tomando los actuales delincuentes que gozan de impunidad. AVC tuvo asesoramiento y entrenamiento guerrillero internacional, incluso con colaboración directa en sus “recuperaciones” y secuestros por parte de las FARC, grupo narcoterrorista al que algunos todavía califican de “ideólogos”. Al ser humano se lo debe reconocer y apoyar cuando se arrepiente de sus errores, los enmienda y los lleva como ejemplo de superación para no volver a cometerlos, no cuando pregona sentirse orgulloso de ellos, aunque hayan costado la sangre de mucha gente, y las lágrimas de otros.