A falta de semáforos con sensores y para pasos peatonales, cientos de “pasos cebra” requieren de un reductor de velocidad colocado antes, para desincentivar a que el resto de carros se venga encima cuando se pretende ceder el paso.
Otros que están en plena intersección deben ser cambiados más hacia la mitad de la calle, evitando se formen colas en las esquinas, con los peligros adicionales al detenerse el auto. Hay que hacer más amigable y segura a la ciudad para todos, particularmente para niños, personas con movilidad reducida, mujeres embarazadas, con discapacidad motriz, visual o auditiva, y privilegiar al peatón sobre el vehículo.
Tarea de la Secretaría de Movilidad y específicamente de la Gerencia de Movilidad de la EPMMOP-Q, acompañada de educación vial por parte de la Secretaría de Seguridad, de la de Educación y de la Agencia Metropolitana de Tránsito.