Hace algunos años, este Gobierno ofreció modernizar el aeropuerto Los Perales en San Vicente-Bahía de Caráquez. Sin embargo, ha transcurrido el tiempo y más bien se ha deteriorado, pues no ha recibido ningún mantenimiento.
Con motivo del terremoto que asoló a la Costa norte de nuestro país ha sido justamente este aeropuerto el que ha servido para recibir la ayuda que llega por vía aérea, en vista de los daños sufridos por el aeropuerto de Manta y el hecho que el de Portoviejo dejó de funcionar hace un tiempo. Ojalá que esta experiencia, aunque en circunstancias tristes, sirva para que las autoridades se den cuenta de la importancia de Los Perales, en el servicio que presta a la Costa ecuatoriana y se lo provea de lo necesario para que vuelvan a operar los vuelos regulares desde y hacia otras ciudades.