En días pasados, Ferrari anunció el regreso de Kimi Raikkonen a su equipo de Fórmula 1 en reemplazo de Felipe Massa, quien solo continuará como piloto de la ‘Scuderia’ hasta el final de la presente temporada.
Muchos allegados a la máxima categoría del automovilismo, incluido Michael Schumacher, consideran que la dupla Alonso – Raikkonen será una “combinación explosiva”, pues ambos son excampeones mundiales y esa es una situación que no se daba en la Fórmula 1 desde hace 25 años.
Aunque podría creerse que, en el hecho de que un equipo tenga en sus filas a dos pilotos de tan alto nivel puede estar la clave para conseguir los títulos (al menos el de constructores), hay experiencias pasadas que demuestran lo contrario.
Hace un cuarto de siglo, la rivalidad entre Ayrton Senna y Alain Prost al interior de McLaren generó varios conflictos dentro y fuera de las pistas. En el 2007, las pugnas entre Alonso y el sorprendente debutante Lewis Hamilton, también en McLaren, sirvieron el campeonato en bandeja de plata a Raikkonen, el menos opcionado de los tres. Los ‘tifosi’ esperan que Ferrari no repita los errores ajenos.