Solo para empresas y emprendedores

Es una columna que analiza la situación y los desafíos de las empresas, las pymes y los emprendimientos en el contexto económico ecuatoriano e internacional. Otros artículos del autor: http://bit.ly/xBasantes Twitter: @XAVIERBAS

Xavier Basantes

Lic. en Comunicación, U. Central. Posgrado en periodismo en U. Andina y diplomado en gestión empresarial del Tec de Monterrey. Periodista económico. Del 2009 - 2016, Editor de LÍDERES. Exeditor de El Comercio TV; ahora Macroeditor de Proyectos Multimedia.

Con la mira puesta en Estados Unidos

Los acercamientos entre Ecuador y Estados Unidos siguen. En la agenda próxima consta una reunión del Consejo de Comercio e Inversiones (TIC), para continuar en la búsqueda de un acuerdo comercial, y el Cuarto Diálogo Bilateral, en donde se espera tener más avances en los temas de migración, intercambio comercial, seguridad y cooperación.

Las expectativas de alcanzar un acuerdo son positivas, en la medida en que las relaciones entre los dos países atraviesan un buen momento. No obstante, la velocidad con la que se pueda concretar este convenio dependerá en buena medida de los resultados de las elecciones en el país norteamericano, previstas para el 3 de noviembre, y que pueden incidir en el desempeño pospandemia de la primera economía mundial.

Pero también dependerá de la velocidad o el interés que el próximo gobierno ecuatoriano quiera imprimir en la agenda. El presidente Lenín Moreno ya anticipó en un encuentro con inversionistas, que un eventual acuerdo no se concretaría durante su mandato, aunque espera que todo quede listo para que en la próxima administración se afiance este convenio, con el principal socio comercial que mantiene el país.

Uno de los principales intereses que tiene Ecuador es atraer más inversión estadounidense, con el propósito de impulsar la reactivación económica tras los efectos del covid-19. Sin embargo, esa aspiración no solo depende de la buena voluntad. También pesan otros factores y en este caso consta el compromiso adquirido por Ecuador ante el FMI, para aprobar una reforma tributaria. Y este precisamente es un asunto que siempre pesa a la hora de tomar decisiones para invertir: la carga impositiva que aplican las naciones a las empresas; sobre todo, si el país espera atraer capitales que se queden por un largo plazo.

De todos modos algo que también suma es la aprobación de la Ley de Modernización de Compañías, que da más ventajas al inversionista. Solo falta el veto del Ejecutivo y eso puede abrir más puertas con Estados Unidos.