Auditorías para las empresas públicas
Un proyecto que estaba arrinconado durante varios años en esferas legislativas acaba de ser aprobado. Se trata de la Ley reformatoria a la Ley Orgánica de Empresas Públicas. Uno de los aspectos fundamentales que incluye esta reforma tiene que ver con la posibilidad de contratar firmas privadas para auditar los balances de esas compañías, sin quitar la capacidad que tiene la Contraloría.
Tras el desastroso manejo que se dio a las empresas públicas en el Gobierno anterior, uno de los objetivos del actual Régimen -que no logra cumplir- ha sido buscar mecanismos para vender, fusionar, liquidar o reactivar la operación y lograr rentabilidad.
La contratación de esas auditorías permitirá identificar con más precisión, los casos de corrupción que en esas empresas se cometieron. Estas se convirtieron en espacios para atender compromisos políticos y ocasionar millonarias pérdidas al Estado.
Los ecuatorianos merecen conocer en qué estado se encuentran, cómo se manejan o manejaron los activos, cuál es la situación financiera, quiénes fueron y son sus administradores, en dónde están las responsabilidades de los perjuicios, entre otros datos.
Con la reforma aprobada por los congresistas, las empresas públicas deberán contratar con sus propios recursos, auditorías financieras externas e independientes a través de compañías privadas especializadas en auditoría y acreditadas por la Contraloría.
Sin duda esta reforma, que espera el veto del Ejecutivo, contribuirá en algo con el objetivo gubernamental de llevar a cabo su plan de monetización de activos. Pero las empresas públicas no solo necesitan tener esas auditorías; también requieren desarrollar otros procesos internos dentro de su gestión.
Por ejemplo, establecer mejores parámetros en la designación de los miembros de sus directorios. Si a eso se suma la posibilidad de emprender iniciativas de gobierno corporativo, mejor.
Sanear estas empresas debe ser una de las prioridades del 2020. Esta gestión puede ser una buena herencia del Gobierno para el país.