El guapo de la barra

Lo que otros callan por temor o timidez, aquí se lo dice sin anestesia. Es comentarista de fútbol de EL COMERCIO.

Alejandro Ribadeneira

Licenciado en Comunicación Social por la Universidad Central. Es periodista desde 1994. Colabora con el Grupo El Comercio desde el 2000 y se ha desempeñado en diversos puestos desde entonces. Actualmente ocupa el cargo de Editor Vida Privada.

Errores de Quinteros antes del juego con Argentina

Gustavo Quinteros registra una serie de desconcertantes tropiezos que pasman a más de uno. El entrenador de Ecuador se empeña en que la afición al menos dude de su proceso por una serie de desatenciones que, ojalá que no, pueden ser costosas en este inicio de las eliminatorias.

1. Llamar a Daniel Angulo... lesionado
A ver, esto es garrafal. Quinteros puso en la nómina al ariete del Santa Fe, a pesar de que estaba lesionado. ¡Tenía dos semanas en proceso de recuperación! ¿Qué pasó? ¿Nadie le informa sobre cómo están los jugadores? ¿No hay mail o WhatsApp? Tremendo papelón que NO ES LA¨PRIMERA VEZ que ocurre. En la Copa América de este año llevó a Jaime Ayoví a pesar de la lesión, con el agravante de que si 'La Yoya' hubiera alcanzado a curarse, de todos modos no podría contar con el jugador en plenitud. Llevó a última hora a Angulo.

2. No hay autoridad
A ver, ¿cómo es posible que la Tricolor no cuente con un jugador del presente de José Quinteros solo porque el club -LDU de Quito- desee usarlo en un cotejo dominical? Aquí hay dos asuntos. Uno es que las fechas de la jornada 13ª estaban definidas con anterioridad, por lo que resultaba muy fácil cambiarlas o en su defecto suspender el Campeonato si Quinteros lo pedía con tiempo. Pero se decidió lo peor: ilusionar al jugador luego de ser convocado, luego hacer lo que hacen los jurados de Ecuador Tiene Talento: decirle que mejor en otra oportunidad. Lo segundo es aún más peligroso, pues, según
Luis Zubeldía, se conversó con el DT de la Tricolor, "quien "entendió los compromisos de Liga". ¿What? O sea, los compromisos de un club le ganaron a los compromisos de la Tricolor. Terrible.

3. Lo mismo con Arboleda y Rojas
Esto también se repitió con los jugadores Robert Arboleda (Universidad Católica) y Juan Rojas (Deportivo Quito), que fueron llamados y luego desconvocados. Eso transmite inseguridad, nerviosismo, mala planificación, poca atención a los detalles.

4. El grupo no viaja unido
Los discursos de unión se contradicen cuando el entrenador decide que tres jugadores no viajen a Argentina. Joao Rojas, de Aucas; Pedro Larrea, de Liga de Loja, y Junior Sornoza, de Independiente del Valle, se quedaron en Quito. Este trío de descolados deberán esperar en la Casa de la Selección. Lo correcto, aunque los jugadores no tuvieran la posibilidad de jugar, era llevarlos con el grupo. Esto crea jugadores de primera y de segunda.

5. La 'Emelección'
Más de fondo resulta que el entrenador sigue empecinado en convocar a muchos de sus expupilos de Emelec cuando el mejor equipo del país es otro y con jugadores con mejor presente.
Todo indica que Quinteros seguirá insistiendo en su fórmula de convertir a Miller en el eje del ataque (por fin está Mena, el hombre que mejor lo entiende dentro del campo de juego), como baluarte de un plantel que no busca el contragolpe, sino el juego de posesión, con marca arriba. Hasta ahora este cambio de estilo, esta 'emelización' dentro de la cancha, no le ha sentado bien a Ecuador. A ver si con los argentinos hay progresos.