A Innovar

Los artículos tratan sobre hecho noticiosos del ámbito de la economía, emprendimiento y la innovación. Otros artículos del autor: http://bit.ly/pMaldonado Twitter: @pedromal

Pedro Maldonado

Licenciado en Comunicación Social por la Universidad del Azuay. Es periodista desde el año 2000. Colabora con el Grupo EL COMERCIO desde el 2006. Empezó en la regional Cuenca. Hoy es Editor de la Revista Líderes.

El trabajo del futuro y viceversa

Es un debate que cada vez toma mayor fuerza a escala global. El planeta está en medio de lo que los expertos llaman la cuarta revolución industrial o la industria 4.0, en la que la tecnología se ha convertido en un aliado de empresas y profesionales, aunque algunos también la consideran casi un enemigo.

Y en el centro de todo se discute sobre el trabajo del futuro y el futuro del trabajo. ¿Cuáles serán los trabajos con más demanda? ¿Qué perfiles buscarán las organizaciones? ¿Cómo se están formando los empleados de futuro? ¿Es lo digital la panacea?

Quienes defienden a la industria 4.0 aseguran que los nuevos desarrollos tecnológicos crearán nuevos empleos. Por el contrario, los que se oponen sostienen que la tecnología eliminará trabajos y eso incidirá en el empleo a todo nivel, en medio de una coyuntura económica global difícil y que incide, entre otros temas, en la generación de nuevos puestos de empleo.

Atrás van quedando los modelos de trabajo en los que el espacio natural era una oficina o una planta de producción con un horario fijo y rutinas casi inalterables.

Hoy ya se habla con frecuencia de modalidades como el trabajo a distancia, el ‘coworking’ o espacios compartidos o la ‘gig economy’, un concepto bastante flexible en la que la persona cumple trabajos esporádicos para distintos empleadores.

Estas y otras maneras de trabajar se apoyan en la tecnología. Allí están las aplicaciones móviles, los teléfonos inteligentes, las videoconferencias en un dispositivo móvil, las redes sociales, entre otras innovaciones que nos acompañan cada día.

Más allá de esta nueva revolución industrial, con sus pros y contras, el reto está en aprovechar estos desarrollos para generar empleo. Según datos de la OIT, en Latinoamérica y el Caribe hay cerca de 26 millones de desempleados y uno de cada cinco jóvenes que busca empleo no lo encuentra. La tecnología tiene que ayudar a mejorar esos indicadores, no a generar una brecha mayor.