El Festival de Cine en Cannes ahora cuenta con una guardería para los hijos de los participantes al certamen. Foto: AFP
En una zona soleada con vistas al puerto, los visitantes más jóvenes de Cannes brincan sobre una colorida alfombra en la primera guardería del mayor festival de cine del mundo.
El luminoso y espacioso lugar, “donde los niños son los nuevos VIP”, fue creado por tres madres de la industria del cine, que hasta ahora habían tenido que apañárselas para compaginar la maternidad con las estresantes jornadas en los certámenes.
Pocas veces se ven niños en el festival, cuyos organizadores hacen todo lo posible para que las estrellas brillen en la alfombra roja pero muy poco para quienes vienen con sus retoños.
Pero por primera vez, este año la muestra abrió una guardería de día, llamada Le ballon rouge (El globo rojo), en un pabellón cerca del puerto.
La estructura sigue el ejemplo del grupo estadounidense Moms–in–Film, que el año pasado hizo lo propio en el festival de Sundance.
La guardería acaba de abrir y un puñado de retoños están jugando, mientras otros intentan hacer una siesta en otra área. También hay un espacio en el exterior con parasoles.
Tres monitoras y una enfermera se encargan del lugar, ayudadas por dos voluntarios.
“Actuar juntas”
Procedente de Los Ángeles en su primera visita al Festival de Cannes, Gail Greaves explica que estuvo pensando en contratar a alguien para cuidar a su hija Arabella de dos años. Pero, como el certamen dura 12 días, la factura sale cara.
“No puedes hacer mucho cuando (los niños) están llorando”, dice, precisando que contratar a una niñera en Cannes puede costar de 20 a 30 euros (USD 22-34) por hora.
Pero buscando en internet, encontró Le ballon rouge. Los visitantes acreditados del festival pueden obtener pases especiales para sus hijos, desde las 10:00 hasta las 18:00, por 50 euros al día.
“¡Es genial! Tienen todo esto y otros niños para jugar”, cuenta Greaves.
“Las mujeres tienen que actuar juntas para que las cosas sucedan”, dice.
Tres profesionales del cine con niños pequeños pensaron en la idea hace unos meses, cuando compartían trucos sobre cómo compaginar la vida familiar con el trabajo. Juntas crearon ‘Parenting at Film Festivals’.
“Estábamos comparando cuestiones sobre lo difícil que es ser madre en un festival”, explica Michelle Carey, una programadora de filmes australiana y una de las tres fundadoras del grupo.
“En enero, empezamos a hablar con otros amigos de la industria, compartiendo consejos, y luego durante el festival de cine de Berlín nos reunimos con varios representantes del festival”, explica a la AFP mientras su hijo de dos años corretea a su alrededor.
Ya con una propuesta, las tres madres se pusieron en contacto con los organizadores del certamen en Cannes y la iniciativa fue concretándose.
Además de la guardería, se ha creado un espacio privado dentro del Palacio de los Festivales, donde se realizan las galas, para permitir que las madres den el pecho.