Imagen referencial. Una lluvia ayudó a los bomberos a controlar este 7 de octubre del 2019 un incendio que llegó a amenazar pinturas rupestres. Foto: EFE
Una lluvia que cayó este lunes 7 de octubre del 2019 sobre el parque de Monte Alegre, en el estado amazónico de Pará, ayudó a los bomberos a controlar un incendio que llegó a amenazar unas pinturas rupestres que datan de 11 000 años, informaron las autoridades de esa región del norte de Brasil.
“La lluvia contribuyó significativamente” para el control de las llamas, que se habían desatado el pasado sábado y eran combatidas por un centenar de bomberos, según explicó a periodistas el teniente coronel Tito Azevedo, responsable de la operación.
Aclaró que, sin embargo, “toda el área sigue siendo vigilada para disipar cualquier duda” sobre la persistencia de algún foco y apuntó que todas las sospechas indican que la causa del incendio ha sido la intensa sequía que se registró en la zona durante semanas y que fue interrumpida por la lluvia de este lunes.
El parque de Monte Alegre, situado en medio de una extensa área de protección ambiental, atesora 15 sitios arqueológicos de gran valor y pinturas y grabados registrados en enormes rocas, que según diversos estudios fueron hechos hace unos 11 000 años y constituyen la prueba de la existencia de antiguas civilizaciones en esa región.
El fuego se extendió por dos flancos del parque y en un principio amenazó la Sierra de la Luna, que tiene grandes paredones rocosos en los que las pinturas rupestres se extienden a lo largo de unos 200 metros.
En ese sitio, las llamas ya habían sido controladas durante la mañana de este domingo, sin que se registraran daños a las pinturas, al menos en las primeras observaciones hechas por los expertos.
Sin embargo, otro incendio, extinguido por completo este lunes, aún mantenía bajo amenaza a la llamada Piedra del Sol, otro paredón rocoso que guarda también numerosas de esas pinturas, incluso aquellas que están mejor preservadas.