Redacción Sociedad
Los maestros no recibirán un pago por las clases que den en esta semana en el Instituto Nacional Mejía, de Quito. Norma Alvear, principal de la Comisión de Reorganización, lo confirmó.
4 700 alumnos
tiene el Instituto Nacional Mejía en la
jornada matutina y 256
profesores.
Indicó que entre otras cosas, revisan el distributivo de horas de los profesores para aplicar los cambios académicos, administrativos y financieros que indica el acuerdo 0404-09, vigente desde el jueves 8. No adelantó ninguna de las medidas que tomarán. “Varios estudiantes me han comentado que ciertos profesores les han dicho que las autoridades pudiéramos ordenar que el plantel sea mixto, enviar a los docentes a la Amazonia, a la Costa, entre otros rumores”. Descartó los supuestos.
El Acuerdo Ministerial establece la remoción de sus cargos del Rector (Guillermo Rosero), del Vicerrector y del Inspector General. También indica que hasta el viernes 16 se suspenden las clases para dar paso a la reorganización.
Ayer, maestros, estudiantes y padres de familia marcharon desde las instalaciones del colegio, en la calle Vargas y Arenas, hasta el edificio de la Asamblea Nacional, en la 6 de Diciembre y Piedrahíta. En la marcha participaron ex dirigentes de la Federación de Estudiantes Secundarios del Ecuador (FESE), con camisetas del Mejía, como ex alumnos.
Una comisión de padres, profesores y alumnos fue recibida por los asambleístas Jorge Escala y Ramiro Terán, del MPD, y Raúl Abad, AP. Este último preside la Comisión de Educación.
Escala repitió que espera que el Ministerio de Educación rectifique y sintonice con el pedido de los alumnos.
“No pueden reestructurar el Mejía, quieren apoderarse del establecimiento”, comentó.
Otro grupo avanzó hasta el Ministerio de Educación, en la Atahualpa y Juan Pablo Sanz, donde los recibió la viceministra de Educación, Gloria Vidal, pues el regreso del ministro Raúl
Vallejo, desde Francia, está programada para esta tarde. Les dijo que mantienen abierto el diálogo, pero que rige el Acuerdo Ministerial.
En la marcha, en la que participaron los miembros de la banda de guerra y los cachiporreros, estuvieron alumnos como Andrés Galárraga, Andrés Delgado y Sergio Rodríguez, alumnos de primero de bachillerato.
“El Gobierno quiere infiltrarse en el colegio. Aquí sí hay partidos políticos, pero no influyen en nada. Les quieren despedir a todos los profesores, según ellos nos han contado”, comentó Galárraga.
Iván Ruiz, presidente encargado del Consejo Estudiantil, señaló vía telefónica que no asiste al colegio porque a diario recibe por lo menos tres amenazas de muerte, a través de llamadas a su celular. Además, le preocupa la posición de los maestros y posibles presiones por la posición que ha mantenido. Quiere graduarse en el Mejía y espera garantías para regresar a clases el lunes.
Negó ser gobiernista. Afirmó que no comulga en varios temas con el Régimen actual. “De lo contrario estaría resguardado por policías. Pedí la destitución del Rector y Vicerrector porque permitieron que el colegio se sume al paro de la Unión Nacional de Educadores. También porque todos saben que miembros de la Juventud Revolucionaria del Ecuador y la FESE se citaban en los alrededores del establecimiento”.
Durante el paro de la UNE, la FESE se reunió y dio una rueda de prensa en la esquina de las calles Arenas y Vargas, a pocos pasos del Mejía. También lo hizo la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador (FEUE).
Teodoro Barros, director nacional de Educación, señaló que a Ruiz le protege el Código de la Niñez y Adolescencia. “No pueden demandarlo por ser menor de edad. Tiene derecho a regresar a las aulas del Mejía sin problema. No pueden expulsarlo y si es necesario le daremos protección”.