Redacción Cultura
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Entre las varias experiencias excepcionales que le tocó vivir a Rainer Simon, él solo recuerda una que le cambió la vida: entrar en la selva amazónica.
Esa relación de más de dos décadas entre la Amazonia y el cineasta y escritor alemán ha dado frutos. El más reciente: la novela ‘Boa del arco iris’, que será presentada esta noche, a las 19:00, en la Asociación Humboldt (Polonia y Vancouver).
Simon, nacido en plena Segunda Guerra Mundial, en 1941, en el pueblo de Hainichen (Sajonia) tiene una relación de 21 años con la selva. Ha dirigido cuatro películas sobre las comunidades Zápara, Secoya, Huaorani y Sarayacu. Su novela es una reconstrucción ficticia de esa relación. Su protagonista, Gregorio, es un alemán que vive en la selva, entre la seducción de la naturaleza y sus recuerdos infantiles en la Alemania oriental. “Mi protagonista no soy yo, pero sí, debo reconocer, que somos bastante parecidos”, bromea el autor.
Uno de los parecidos más interesantes aparece en el episodio cuando Gregorio recuerda la ocupación de las tropas rusas de su pueblo natal. “Eso pasó así como lo cuento. Estábamos en el medio de rusos y estadounidenses y esperábamos a ver quién llegaba primero”. El socialismo real fue más rápido.
Simon es una cantera inagotable de historias. Su formación socialista, su condición de cineasta bajo el control totalitario, luego tras la caída del muro; esa misma condición bajo las antojadizas leyes del mercado, su vida en la selva, su relación con los indígenas amazónicos (es padrino de media docena de niños sarayacu).
Todo ello se mezcla y difumina en esta nueva novela.