La Corte Constitucional

La Corte Constitucional tiene en sus manos varios temas de máxima expectación. Uno de ellos es el pronunciamiento sobre los cambios a la Constitución, que debe cumplirse en un plazo perentorio de 45 días por mandato de la Ley.

El acto proselitista, con el cual las autoridades de la Asamblea Nacional entregaron a la Corte el pedido para que esta se pronuncie sobre el carácter del cambio constitucional, mostró el afán de Alianza País por obtener un aval aun antes del plazo que contempla la norma.

El tema de los cambios constitucionales es complejo. Hay asuntos que pudieran evacuarse por la vía de una enmienda constitucional. Otros, que son de fondo y que cambian aspectos estructurales, debieran procesarse por medio de una reforma cuya aprobación se debe presentar ante una votación popular para su aprobación o negación.

Ese mecanismo, tantas veces invocado por el Presidente y sus operadores, hoy ya no parece ser tan importante ni definitivo cuando de los aspectos políticos de especial y particular atención del Mandatario se trata.

La nota que publicó diario EL COMERCIO en su edición de ayer muestra que muchas de las causas que estudia y despacha la Corte Constitucional se establecen como prioritarias por sobre otras. Las que merecen mayor atención son aquellas en las cuales el Poder Ejecutivo tiene interés. Mientras tanto, el organismo ha dejado sin atención expedita muchas causas pendientes. ¿Cómo actuará en este caso?

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