La Secretaría de Hidrocarburos suscribió dos contratos petroleros en el Auditorio del Ministerio de Sectores Estratégicos. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO.
La mañana del jueves 16 de abril del 2015, la Secretaría de Hidrocarburos suscribió dos contratos petroleros en el Auditorio del Ministerio de Sectores Estratégicos, ubicado en el norte de Quito.
El primer contrato fue para la exploración y desarrollo del bloque 28, ubicado en la provincia de Pastaza. Esta área forma parte de los nuevos bloques del suroriente que aún no han sido desarrollados en el país.
La firma se dio entre la Secretaría de Hidrocarburos, como representante del Estado, y el consorcio de empresas estatales encabezado por Petroamazonas en sociedad con Enap de Chile y Belorusneft de Bielorusia.
El gerente de Petroamazonas, Oswaldo Madrid, dijo que la exploración en esta área arrancará con una inversión de USD 30 millones que será de exclusivo riesgo de Enap y Belorusneft.
Añadió que la producción de estos campos podría llegar en dos años y estaría en el orden de 7 000 barriles diarios.
También dijo que se estiman reservas en el orden de entre 30 millones a 40 millones de barriles.
Respecto a la tarifa que el Estado pagará por esta explotación, no dio una cifra sino que indicó que esa información la daría la Secretaría de Hidrocarburos.
La Secretaría de Hidrocarburos suscribió dos contratos petroleros en el Auditorio del Ministerio de Sectores Estratégicos. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO.
La secretaria de Hidrocarburos, Ivonne Fabara, tampoco dio una cifra al respecto, pero señaló que la tarifa estará determinada según el nivel de producción del bloque y de sus inversiones.
El plazo de este contrato es de 15 años con la posibilidad de una extensión de 5 años más.
El segundo convenio suscrito hoy por la Secretaría de Hidrocarburos fue un contrato modificatorio al de la empresa Enap de Chile en el bloque 47, debido a que la empresa aumentó sus inversiones y encontró reservas en el orden de 8 millones de barriles en el campo Inchi.
Por ello, se extendió un plazo adicional para la próxima explotación de este campo y además se estableció una nueva tarifa para el campo Inchi, en el orden de alrededor de USD 30 por barril extraído.
Entre los dos contratos se espera una inversión cercana a USD 100 millones en el sector petrolero.