Seis de cada 10 adultos mayores no lograron vencer el covid-19 en el Ecuador. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
El mayor impacto del coronavirus sigue recayendo en las personas mayores de edad y, principalmente, hombres. Esta tendencia no ha variado en Ecuador desde que inicio la pandemia.
Los fallecidos confirmados y probables de covid-19 a escala nacional ya superan los 10 mil y de estos el 60% corresponde a la tercera edad, de 65 años de edad en adelante.
Es decir, seis de cada 10 adultos mayores no lograron vencer la infección viral y se trata, en su gran mayoría, de hombres con enfermedades colaterales, como hipertensión, diabetes, males coronarios, etc.
Un estudio de científicos chinos sobre los factores de riesgo asociados a las muertes por este virus reveló que la edad avanzada, los problemas de coagulación de la sangre y los síntomas de septicemia (respuesta fulminante del organismo para combatir una infección) son las tres causas más recurrentes al morir por esta enfermedad.
Por cada año más de edad de la persona infectada, calcularon que hay 10% más de riesgo de muerte en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
El segundo grupo etario afectado está entre 50 y 64 años edad, pues tres cada 10 están falleciendo, en los hospitales, casas y otros sitios.
Ciro Ugarte, directivo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), explicó ayer a EL COMERCIO, dos razones por los que la mortalidad sigue creciendo en Ecuador.
Por un lado, elogió al sistema de atención primaria de avanzado y gratuito, pero alertó que su acceso es limitado, por lo que es necesario aumentar los servicios e informar a la población que están disponibles.
Esta limitación-explicó- se debe al aumento del número de casos en el corto tiempo. Esta mayor demanda de atención y una ocupación hospitalaria alta ha llevado al segundo factor: las personas tienen la percepción de que al ir a las casas de salud se ponen en riesgo y, esto a su vez, hace que esperen a último momento para ir.
Frente a esta situación, Ugarte recomendó tomar contacto con las áreas médicas de forma oportuna y para esto usar teléfono, redes sociales para tomar medidas a tiempo.
Entre los adultos mayores que se contactaron de inmediato con profesionales de la salud está Esther de Jesús, de 105 años. Ella logró vencer a la infección en Paltas-Loja en su casa por un mes.
Los médicos visitaron a doña Esther constantemente y se comunicaban vía telefónica para monitorear el avance de la enfermedad hasta su recuperación.
En el tercer grupo etario en la estadística de mortalidad están los más jóvenes, de 20 a 49 años de edad. Uno de cada 10 fallece por el coronavirus.
Si bien los fallecimientos son más bajos en estas edades, demandan más atención porque son los que más se contagian a escala nacional.
Los epidemiólogos remarcan en que deben reforzar las medidas de bioseguridad (mascarilla, lavado de manos y distancia social), pues muchos son asintomáticos.
Esto hace que la transmisión del virus continúe entre los niños y adolescentes y los de más riesgo, que son los mayores de 50 años de edad.
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