Las acciones expuestas en la conferencia se sintetizan en una estrategia que tiene una prolongación de las actividades terrestres hacia el mar. Foto: EL COMERCIO
Buscar la posición para controlar el mar y asegurar las rutas de comunicaciones marítimas, son algunos de los planteamientos que hizo el ministro de Defensa del Ecuador, Oswaldo Jarrín, dentro de la Estrategia Nacional para la protección marítima y el desarrollo.
El Ministro manifestó que lo ideal es utilizar la plataforma natural de las islas Galápagos a manera de un “portaaviones” para mirar el continente, de esta forma aprovechar la posición estratégica con la que se cuenta y asegurar el mar territorial del país. Fu exposición fue parte de la jornada de discusión sobre el proyecto de la Ley de navegación, gestión de seguridad y protección marítima que se cumplió este jueves 20 de junio del 2019 en la Universidad Católica de Guayaquil.
El funcionario puntualizó que cuando se habla de la protección de las comunicaciones, del transporte, y presencia de narcotráfico no se puede tener limitaciones de horarios, condiciones o medios. “Vamos a instalar un radar primario de la Fuerza Aérea para tener la detección de 160 millas de capacidad de alcance”, con ese radar se pretende cubrir el área continental combinando la exploración aeromarítima, conjuntamente con las capitanías de puertos en Galápagos, para obtener resultados más efectivos desde la isla.
Además desmintió que las islas Galápagos vayan a ser intervenidas con una base militar y que se vaya a dar una gran contaminación afectando a la región. “60 vuelos se realizan a Galápagos en jets por semana. De lo que estamos hablando es de un avión por mes, de dos a tres días, en casos de emergencia o de reabastecimiento”.
Darwin Jarrín, comandante general de la Armada, también dijo que “está absolutamente descartado que habrá una base militar extranjera en cualquier parte del territorio nacional, sea continental o insular”.
Las acciones expuestas en la conferencia se sintetizan en una estrategia que tiene una prolongación de las actividades terrestres hacia el mar. Se realiza la exploración aeromarítima, investigación científica con dos buques, uno multipropósito y otro oceanográfico; el tráfico de los puertos, el patrullaje marítimo, apoyo y cooperación a la pesca; apoyo a la navegación y atención a los accidentes y desastres que puedan producirse; y la cooperación marítima internacional.
Todos esos aspectos se desprenden de la estrategia nacional y están contemplados en el proyecto de Ley, que ya se ha expuesto a la Asamblea Nacional y a la Comisión de Relaciones Internacionales y Soberanía.
Finalmente se instalaron tres mesas de diálogo para abarcar el sistema de pesca y otros temas. Estuvieron presentes miembros de la Armada Nacional, Fuerza Aérea y representantes de la Cámara Marítima del Ecuador (CAMAE).