Tegucigalpa, Nueva York, Caracas. DPA, AFP y Reuters
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Manuel Zelaya sigue con su campaña para recuperar la Presidencia de Honduras. Ayer recibió el espaldarazo de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que condenó el golpe militar que derrocó al empresario, quien aseguró que el jueves volverá a su país.
La resolución de la ONU, que fue adoptada por aclamación, reconoce como presidente constitucional a Zelaya, reclama que se le permita finalizar su mandato, que concluirá el 27 de enero. Además, rechaza otorgar reconocimiento al Gobierno del presidente designado por el Congreso hondureño, Roberto Micheletti.
Zelaya ocupó un lugar en los asientos reservados para la misión hondureña en la Asamblea de la ONU cuando el organismo adoptó la resolución que condena el golpe del domingo pasado.
En rueda de prensa, Zelaya afirmó que volverá a pesar de la orden de captura lanzada en su contra por el Régimen interino (ver nota compartida).
“Creo que las FF.AA. van a rectificar”, mientras que sobre la orden de captura contra él dijo que “en los tres años y medio de mandato nunca he hecho nada a nadie ni he perseguido a ninguna persona ni a los opositores”.
El Presidente hondureño señaló que su objetivo ahora es acabar su mandato, para luego volver a la vida civil y retomar su profesión de agricultor. De paso, también dejó en claro que abandona su propósito de buscar la reelección presidencial porque “en Honduras no hay esa posibilidad”.
El depuesto Mandatario, posteriormente, se dirigió a Washington, para participar de la Asamblea General extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) convocada con motivo de la crisis hondureña. El foro se instaló la tarde de ayer.
Mientras Zelaya continuaba con sus esfuerzos diplomáticos, miles de hondureños salieron ayer a las calles para rechazar el retorno del depuesto Jefe de Estado, apoyar al Gobierno interino y para respaldar la acción de los militares que arrestaron y sacaron del país a Zelaya.
En Tegucigalpa, la capital del país, y San Pedro Sula, a 250 kilómetros al norte, decenas de miles se concentraron alrededor de la plaza central de las ciudades vestidos de blanco para simbolizar que apostaban a la paz.
Micheletti ,apareció en la plaza junto al jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, general Romeo Vásquez Velásquez, para agradecer a los manifestantes.
Por su lado el jefe militar, el más vitoreado de los oradores, dijo que las “Fuerzas Armadas lo único que hicieron fue cumplir con su deber constitucional”, a lo que los asistentes le respondieron con “muchas gracias”.
Mientras tanto, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, expresó ayer que habría que evaluar una intervención militar de la ONU en caso de que Zelaya fuera centro de una agresión cuando retorne a su país, lo que ha anunciado para el jueves. Zelaya prevé regresar a su nación junto con su par de Argentina, Cristina Fernández, así como con el jefe de la OEA, José Miguel Insulza.
“La Alba estará atenta en las próximas horas, porque un escenario de agresión contra la delegación que va a Honduras abriría otro tipo de puerta. Entonces, habría que plantear la intervención militar de la ONU”, dijo Chávez.