La entrega de la licencia ambiental a favor de la estatal Petroamazonas para la explotación de los campos Tambococha y Tiputini, en el bloque 43 o bloque ITT, generó 15 obligaciones para la empresa petrolera.
De acuerdo con el documento, la licencia obliga a Petroamazonas al cumplimiento del Estudio de Impacto Ambiental y Plan de Manejo Ambiental del proyecto de desarrollo y producción de ambos campos.
También manda a la empresa a realizar el monitoreo interno y enviar los respectivos reportes al Ministerio del Ambiente.
Este monitoreo implica hacer un registro completo de las emisiones a la atmósfera emitidas en el lugar de la explotación, las descargas líquidas y sólidas de residuos en el lugar, así como la remediación de suelos y piscinas contaminadas. Estos reportes deberán ser enviados de manera mensual durante el período de perforación de pozos. La información será de forma trimestral para las instalaciones y actividades hidrocarburíferas y anual para las actividades de almacenamiento y transporte de crudo.
En caso de existir remoción de la capa vegetal por cualquier actividad, como disposición de tuberías, campamentos, etc., Petroamazonas deberá obtener y presentar la aprobación del inventario de recursos forestales con su respectivo método de valoración económica de los bosques y vegetación nativa. Esto, previo al inicio de las actividades en la zona.
Adicionalmente, los protocolos de rescate de fauna y flora deberán ser revisados, analizados y aprobados previamente por Ministerio del Ambiente.
De acuerdo con información enviada por la entidad a la Asamblea, en el Parque Nacional Yasuní se han registrado 204 especies de mamíferos, 610 de aves, 139 de anfibios, 121 de reptiles y 268 variedades de peces.
Adicionalmente, el Ministerio informó ayer que está realizando la “caracterización de los diferentes ecosistemas” en los bloques 43 y 31 . Indicó además que se cuenta con una caracterización hidrográfica de todos los ríos de ambas áreas.
La entidad sostuvo que antes y durante la actividad petrolera en la zona se hará un levantamiento de bienes y servicios ambientales con el fin de construir el diagnóstico ambiental o línea base, que estará controlado mediante auditorías y monitoreos periódicos.
La presidenta del Centro Ecuatoriano de Derecho Ambiental, María Amparo Albán, indicó que si bien la ley no determina qué tan periódicos deben ser estos monitoreos para preservar el ecosistema, el Ministerio del Ambiente debe establecer los requerimientos en el Estudio y Plan de Manejo Ambiental.
Añadió que en ecosistemas sensibles como es el caso del Yasuní, estos monitoreos deberían ser mensuales.
Petroamazonas deberá, además, utilizar en el proyecto procesos y tecnologías que atenúen “y en la medida de lo posible” prevengan los impactos negativos al ambiente, según el texto de la licencia ambiental.
La petrolera estatalserá enteramente responsable de las actividades que cumplan sus contratistas o subcontraistas.
Finalmente,la empresa estará sujeta a auditorías ambientales de parte del Ministerio del Ambiente y deberá mitigar cualquier derrame en la zona.
En contexto
En el Bloque 43 se ubica el eje de campos petroleros Ishpingo, Tambococha y Tiputini (ITT) que tiene reservas por 919 millones de barriles de petróleo pesado. De los tres campos, el Ishpingo y el Tambococha están dentro del Yasuní. El Tiputini está fuera del área protegida.