Londres. DPA
Una corte de Londres declaró inocente por falta de pruebas a la cantante Amy Winehouse. La artista era acusada de agredir a una de sus fans.
La denunciante alegaba que Winehouse la había golpeado cuando le pidió hacerse una fotografía con ella. Sin embargo, la cantante negó haber querido herir a la mujer a propósito.
Según su declaración, se sintió amenazada porque esta, “que estaba borracha”, la rodeó con sus brazos. El interrogatorio a varios testigos no arrojó una versión clara de lo ocurrido, entre otras cosas porque muchos habían ingerido alcohol y estaban ebrios cuando ocurrieron los hechos.
“Después de haber escuchado las declaraciones de todos los testigos, no puedo estar seguro de que no se tratara de un accidente”, argumentó el juez que preside la sala, Timothy Workman.
El juez expresó además sus dudas de que la pequeña inflamación en el ojo de la fanática haya sido producida por un puñetazo. La artista, de 25 años y vestida con una falda negra hasta las rodillas, una chaqueta gris y una camisa blanca, abandonó satisfecha el tribunal. “Me siento aliviada”, declaró, tras lo cual fue protegida de los fotógrafos por su padre Mitch y sus guardaespaldas.
La demanda afirmaba que la bailarina Sherene Flash le pidió de forma amable una foto a Winehouse, detrás del escenario, durante un evento benéfico en septiembre pasado. Cuando la fan quiso que se sumara a la foto un amigo, Winehouse le dio un puñetazo en el ojo derecho.
La cantante desmintió que haya sido así y declaró en cambio que se sintió amenazada por la mujer, bastante más grande que ella. Cuando esta le pasó el brazo alrededor del cuerpo, quiso apartarlo de un manotazo.
Su portavoz indicó que Amy quiere dejar atrás el episodio y mirar al futuro. Durante los dos días de juicio, Winehouse, famosa por sus excesos con el alcohol y las drogas en el pasado, dio la impresión de hallarse muy sana. Su imagen era diferente a la del año pasado cuando se veía muy delgada por el posible efecto de los estupefacientes. La artista es conocida además por haber ganado cinco veces el Grammy.
La semana pasada, la artista se divorció de Blake Fielder-Civil, quien en entrevistas pasadas reconoció haber introducido a Winehouse en el uso de drogas.