La temperatura polar extrema ha obligado a las autoridades del norte de Estados Unidos a decretar el cierre de escuelas y oficinas públicas. Foto: EFE
El norte de Estados Unidos se ve afectado por una peligrosa ola polar que este miércoles 30 de enero del 2019, llegó a temperaturas de -33°C. La situación ha obligado a declarar la emergencia en algunas regiones y provocado el cierre de escuelas, oficinas del gobierno y negocios.
En casi una decena de estados, los pronósticos anuncian las temperaturas más bajas en una generación, o que incluso podrían establecer nuevos récords.
Según informó en Twitter el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés), “una masa de aire ártica récord permanecerá sobre el centro y este de los Estados Unidos durante los próximos días. Los valores de enfriamiento por viento de 30 a 60 grados por debajo de cero serán comunes en los llanos del norte, los grandes lagos y el medio oeste superior”.
Una masa de aire ártico se desprendió del vórtice polar que habitualmente rodea al Polo Norte, provocando la ola polar.
Usuarios mostraron en redes sociales los efectos del frío extremo sobre Chicago. Michigan y Wisconsin declararon la emergencia ante el avance de las temperaturas glaciares.
Las autoridades pidieron a la población que intente quedarse en su casa este miércoles, pues se espera que las temperaturas desciendan más. Numerosas escuelas, negocios y agencias gubernamentales anunciaron su cierre en múltiples estados.
“La gente expuesta al frío extremo puede congelarse en cuestión de minutos”, advirtió el NWS.
En Minneapolis, Minnesota, las autoridades han abierto refugios de emergencia en edificios públicos y bibliotecas, mientras que los pasajeros de autobuses y trenes podrán mantenerse dentro para calentarse. En ciertas zonas, se recurrió a encender las rieles para que el transporte ferroviario no se detenga.
El presidente Donald Trump aprovechó la ocasión para expresar su escepticismo con el calentamiento global. “Qué diablos está pasando con el calentamiento global? Por favor vuelve rápido, te necesitamos!”.
“Las tormentas invernales no prueban que el calentamiento global no esté ocurriendo”, tuiteó la Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA), que está a cargo del servicio meteorológico, junto a un dibujo que ilustra que el aumento de las temperaturas de los océanos fueron precisamente responsables de estos episodios de frío extremo.
Los científicos consideran que el cambio climático está causando temperaturas extremas. Una teoría es que las corrientes de aire ártico que habitualmente circundan el Polo Norte se debilitaron y se movilizan hacia el norte o el sur debido al calentamiento global.