Las vías se inundaron en Esmeraldas

Redacción Esmeraldas

‘Todos queríamos la lluvia, pero no tanta”. Así reflexionaba ayer, a las 09:25, Ramón Angulo, tras 48 horas de aguacero que soportó la ciudad de Esmeraldas. Eso causó que las  calles se inundaran.

Sentado bajo una visera de una parada del autobús, frente al parque infantil, Angulo observaba cómo los vehículos avanzaban con dificultad por la calle Colón. Pero quizá los más afectados fueron los peatones, quienes no podían cruzar de una acera a otra.

Angulo, de 63 años, recordaba que hace 10 años los esmeraldeños tenían que pagar entre USD 0,10 y USD 0,15 a jóvenes, que se apostaban en las esquinas, para   que les ayudaran a cruzar  las calles. “Unos usaban triciclos, pero otros cargaban a los oficinistas y a los estudiantes, para que no se mojaran los zapatos”,  recordaba.
Las fuertes lluvias fueron el tema más comentado por los vecinos de Esmeraldas.  

El intenso aguacero demostró que el sistema de alcantarillado ha colapsado. No es para menos, si se toma en cuenta que la mayoría de la red de la ciudad fue instalada en 1958.

En varias de las calles inundadas se hicieron presentes trabajadores de la Empresa de Agua Potable y Alcantarillado (Eapa) San Mateo. Ellos, con la ayuda de palas y barrillas, destapaban los sumideros.   Álvaro Ferrer, vocero de la Eapa, aseguró que 12 cuadrillas atendían la emergencia.

Angulo esperó, apretujado junto a  otras personas, que evitaban mojarse. Él salió temprano para cancelar la planilla del  servicio de agua potable.

Pero no todos podían esperar. Varios estudiantes, amas de casa, oficinistas... caminaban presurosos, protegidos con paraguas y plásticos. Las clases en el  colegio Tácito Ortiz, ubicado en el barrio Las Palmas, se suspendieron porque las aulas se anegaron.

Según Fabián Salas, técnico del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología, las lluvias seguirán hasta abril.  Comenta que para este mes en Esmeraldas se esperan 130,2 mm de lluvias.

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