Redacción Santo DomingoLos finqueros de la parroquia Alluriquín en Santo Domingo de los Tsáchilas estuvieron más tranquilos ayer. La maquinaria de la Prefectura evacuó el lodo, piedras y troncos de la vía que une este poblado con el recinto Las Damas. El paso en esta carretera quedó bloqueado por los derrumbes registrados el lunes pasado. Desde entonces, 80 pequeños ganaderos de la región no pueden transportar la leche.“Tenemos la esperanza que la vía se rehabilite definitivamente para sacar la leche y no tener que caminar por una trocha”, dijo el campesino Luis Nogales, de 68 años, quien comercializa 75 litros de leche al día. Él estuvo complacido porque los camiones lecheros puedan ingresar a varias fincas, aunque en la vía a Alluriquín-Las Damas aún existen cinco derrumbes.A la finca de Tobías Carvajal, de 66 años, aún no pueden llegar. Él tiene una propiedad de 30 hectáreas en este sector y debe caminar cuatro horas por un camino de herradura para sacar su producción. “Por eso es necesario que la vía esté buena”. Obtiene 30 litros al día.Según Carvajal, los finqueros tampoco pueden sacar naranjilla, caña de azúcar, queso y otros productos que se quedan en las fincas por la falta de transporte.Efraín Nogales es uno de los fundadores de Alluriquín. Vive en el barrio San Miguel desde hace 75 años cuando llegó de Sigchos (Cotopaxi). Dijo estar asombrado por el lodazal que cayó desde el mediodía del lunes. Ayer hubo calma porque no se suscitaron más derrumbes.
Los deslaves en este barrio afectaron las casas de María Albuja, César Piedra, Julio Guaspi, Fabián Balseca y Polibio Guillén. Desde ayer, los técnicos de la Municipalidad de Santo Domingo elaboran un informe para trasladar a los damnificados a un albergue hasta que se realicen las reparaciones.El prefecto de Santo Domingo de los Tsáchilas, Geovanny Benítez, dispuso que tres volquetes, una minicargadora, una retroexcavadora y una cargadora despejen la carretera y se mantengan en este lugar.