El Complejo de Ingapirca en en cantón Cañar. Foto: Giovanni Astudillo / EL COMERCIO
La parroquia Ingapirca, perteneciente al cantón Cañar, enfrenta una difícil situación de conectividad. Sus dos carreteras de acceso están afectadas por el colapso de la carpeta asfáltica, lo cual pone en riesgo la movilización vehicular.
Esta parroquia está conectada a través de las vías Ingapirca-El Tambo (14 kilómetros) y la Ingapirca-Honorato Vázquez (18 km). Ambas registran un alto flujo vehicular, principalmente, por las actividades turísticas, agrícolas y ganadera.
En esta parroquia está el Complejo Arqueológico de Ingapirca y otros sitios patrimoniales incas y cañaris. Sus habitantes también viven de la ganadería y agricultura como la siembra de granos, cereales y hortalizas, principalmente.
Las familias de las 14 comunidades venden la leche a las fábricas de lácteos de la provincia. Según Édgar Sigüencia, presidente de la Junta Parroquial, todas estas actividades económicas están afectadas por el mal estado de las vías porque los conductores no quieren ingresar.
El 22 de marzo de 2018, las autoridades parroquiales amenazaron con una protesta con el cierre de las vías para ser atendidos por las autoridades provinciales y nacionales. A partir de esto, mediante diálogo, el Ministerio de Transporte acordó intervenir en la vía Ingapirca-El Tambo.
La mañana de este lunes 26 de marzo del 2018 ingresó parte de la maquinaria pesada de la empresa Fopeca para trabajar en los kilómetros ocho y 14 y recuperar parte de la vía que colapsó.