El té verde pudiera atenuar el efecto de fumar y de esta forma disminuir el riesgo de sufrir el cáncer de pulmón. Lo dice una investigación realizada a más de 500 personas, publicada ayer por BBC Mundo.
Los investigadores de la Universidad Médica Chung Shan analizaron a fumadores y no fumadores que bebieron al menos una taza de té al día. Descubrieron que ellos redujeron su riesgo de modo significante. Así se dijo en la Conferencia de la Asociación Estadounidense de Investigación del Cáncer, de EE.UU.
El té verde se produce con las hojas secas de la planta Camellia sinesis y es una bebida muy popular en toda Asia.
Las tasas de muchos tipos de cáncer son mucho más bajas en esa región del mundo.
Estudios de laboratorio demuestran que los extractos del té verde, los polifenoles, pueden evitar el crecimiento de las células cancerosas.
Pero los resultados de los estudios que se han llevado a cabo en humanos han sido mixtos.
En julio de 2009, el grupo de investigación Cochrane, basado en Oxford, Inglaterra, publicó un análisis de 51 estudios sobre este té y el cáncer. Incluyó a más de 1,5 millones de personas. Concluyeron que las investigaciones son conflictivas sobre si previene o no ciertos tipos.
El doctor I-Hsin Lin, a cargo del estudio, halló que las personas que no beben té verde mostraron cinco veces más probabilidades de sufrir cáncer pulmonar que los que beben al menos una taza de té diaria. Entre los fumadores, quienes no beben té verde mostraron 12 veces más probabilidades de riesgo.