Ciudadanos venezolanos caminan por una autopista cercana a Cúcuta (Colombia). Foto: EFE
La venezolana Sheila González, quien dejó su natal Maracaibo para buscar oportunidades fuera de su país, considera “fabuloso” el estatuto para los migrantes anunciado por Colombia, con el cual espera dar un salto en sus condiciones de vida en el país andino.
Para González, que trabaja como vendedora en Cúcuta, el beneficio que ofrecerá el estatuto radica en que muchos de sus compatriotas podrán trabajar legalmente y “producir para Colombia”.
El Estatuto de Protección Temporal para Migrantes Venezolanos es una carta de derechos que beneficiará a unos dos millones de inmigrantes venezolanos, regulares o irregulares, para dar soluciones de largo plazo a sus necesidades y sacar del limbo legal a aquellos que ya están establecidos en el país, incluso con hijos nacidos en territorio colombiano.
El director de Migración Colombia, Juan Francisco Espinosa, explica que la medida, que tendrá una vigencia de 10 años, da a los venezolanos “la posibilidad de hacer su vida en Colombia”, trabajar, desplazarse en el territorio, acceder al sistema de seguridad social, a la salud, la educación y a la inclusión financiera.
Sin embargo, la incertidumbre marca el camino de la implementación del Estatuto en las zonas fronterizas de Colombia. En Cúcuta, que tiene el principal paso fronterizo con Venezuela, viven 96 133 migrantes de ese país.